viernes, 27 de febrero de 2009

Recomendaciones Febrero 2009

Aunque el mes de febrero ya se acaba, las novedades aún se encuentran calentitas en vuestras tiendas. Con todo "lo bueno" recién llegado, paso a daros mis recomendaciones.

Al fin Planeta ha decidido publicar la selección de obras de Batman de Darwyn Cooke, recopiladas en el tomo Batman: Ego, en la que el plato fuerte muestra una historia en la que Batman se deberá enfrentar consigo mismo en uno de los monólogos disociados que mejor han interpretado al personaje. Yo personalmente lo veo como una especie de rechazo al Batman ultraviolento presentado por otros autores, frente a un Batman mucho más recto e íntegro. Aunque es una obra magnífica, no creo que sea del interés de los que no sigan al autor o que sólo busquen las historias esenciales del personaje. Gráficamente cercano al mundo de la animación y realmente magnífico, pero argumentalmente demasiado intrascendente para algunos aficionados, supongo.

En cuanto a las novedades en cómic europeo, y con una distancia de casi un año desde el especial de Munuera, ahora se recopilan Las Aventuras de Spirou y Fantasio de Jean-Claude Fournier. Situadas cronológicamente antes de las historias de Morvan y Munuera, las aventuras de este tomo (El hacedor de oro, Glucosa para Noemi y La abadía encantada) son aún más respetuosas con el espíritu original de las aventuras de Franquin. Representan un nuevo comienzo, y con Fournier con control total de la obra (guión y dibujo), esta etapa es una de las más recordadas del personaje, aunque con estos clásicos eternos se podrían señalar todos los álbumes como memorables.

Siguiendo mi costrumbre de recomendar sólo tomos o números unitarios, no añadiré más a lo publicado por Planeta, pero tengo que recordar que este mes aparece el último número de la serie de vértigo Y El Último Hombre y que al fin aparece una nueva entrega de Los Muertos Vivientes de Robert Kirkman. Dos imprescindibles.

Por su parte, Norma recupera lo poco que le va quedando de la línea de cómics de ABC (línea de superhéroes de Alan Moore en la independiente, por entonces, Wildstorm) con el más variopinto y menos recordado se sus títulos. Tomorrow Stories es una antología de historias cortas de diferentes personajes, dibujadas por diferentes artistas y que van desde el claro homenaje a The Shadow/Spirit con parodia cuarentera de por medio, al niño científico que vuelve locos con sus inventos a su familia y al pueblo en que habita. Yo personalmente me encontré algo liado con tanto cambio entre personajes, pero disfruté mucho de las aventuras del joven Jack B. Quick, el niño inventor, con dibujos del siempre magnífico Kevin Nowlan. No apto para todos los paladares.

La incertidumbre llega con la nueva etapa de The Spirit. Tras la perfecta etapa de Darwyn Cooke, el equipo de valientes que se atreven a tomar el relevo de la serie son Sergio Aragonés y Mark Evanier (Groo) a los guiones, con los lápices de Paul Smith (X-Men, Leave it to Chance), aunque en este número, serán varios los autores que se atreverán con el personaje. Lo que me recuerda una serie de finales de los noventa llamada Las nuevas aventuras de Spirit (que contaba con el beneplácito de Eisner) en las que grandes nombres del cómic homenajeaban al personaje en una antología de historias que supongo de un resultado parecido a este número. Yo le daré una oportunidad.

Además, Norma no deja pasar la oportunidad del inminente estreno de la película de Watchmen (este mes la reedita Planeta en formato absolute con nueva portada), considerada por muchos como la obra maestra de Alan Moore, y publicará 3 libros relacionados con la misma. Dos de ellos, me son más indiferentes al estar directamente relacionados con la propia película, pero el tercero está más vinculado al cómic y me parece más que interesante. Watching the Watchmen es una obra teórica protagonizada por el punto de vista de Dave Gibbons (dibujante de la obra), en la que desgrana gran parte del proceso creativo de la misma. Bocetos previos, esquemas de cada número y documentos sobre la relación entre los creadores y la editorial durante su creación serán algunos de los componentes más interesantes de este tomo. Gibbons garantiza que ha recopilado para esta obra todo el material que ha logrado encontrar. Más allá del valor artístico que podamos encontrar sobre el artista británico, esto es posiblemente lo más parecido a un making of que podamos ver. Además también está involucrado en el diseño del libro Chip Kidd, que tras su participación en otros libros parecidos (magnífico el dedicado a las aventuras animadas de Batman) me parece toda una garantía de calidad y de trabajo atractivo. Me encanta este tipo de materiales y además esa portada parece que me está mirando...

Aunque la mejor forma (o la peor, según se mire) de preparar el estreno de la película es darle una buena relectura a Watchmen, puede que en algún caso, esta ya esté muy reciente o que ya se haya hecho en repetidas veces. En tales casos, aparte de la opción de Norma, Rafa Marín ha realizado una interesante obra teórica llamada W de Watchmen (título guiño a otra de las obras de Alan Moore) publicada por Dolmen, en la que da su interpretación de la obra y resalta artificios interesantes de su estructura, características de los personajes y referencias que se os pudieron pasar en la segunda, tercera o cuarta lectura de Watchmen. El hecho de no haber sido elegida la portada que a mí me gustaba no impide que siga siendo una recomendación obligada de este mes.

Finalmente, en un mes prácticamente dedicado al barbudo inglés (tres de las seis recomendaciones que hago están vinculados a él) en el preámbulo de uno de los estrenos cinematográficos relacionados con el mundo del cómic más esperados, la elección del sólo puede quedar una recaerá en el Watching the Watchmen de Gibbons, por el gran trabajo de Kidd para dar forma a todo ese contenido y porque cuando vi que se iba a publicar en USA me entraron unas ganas terribles de tenerlo.

El mes que viene más...

Confesiones de un comiquero (Enero 2009)

Antes de poner las recomendaciones de febrero, ya iba siendo hora de pasar por el confesionario. Como culpable que soy confieso:

Planeta
- Batman vol 2 Nº 18, 2,95 €
- Leyendas de Batman Nº 14: Hombre Lobo, 5,95 €
- Archivos de Batman Nº 7, 25 €
- Universo DC: Robin Nº 1 (de 6), 25 €
- Robin vol 2 Nº 1, 3,95 €
- Brave and The Bold Nº 2: El Libro del Destino, 13,95 €
- Clásicos DC: Los Nuevos Titanes Nº 33, 10,5 €
- Universo DC: Flash Nº 6 (de 7), 24 €
- BD: Trolls de Troy Nº 1, 19,95 €
- El Asombroso Hombre Lobo Nº 1, 12,95 € (pendiente de compra)

Panini
- Marvel Gold: Los Vengadores, La Guerra Kree-Skrull, 15 €

Norma
- WildCATs de Alan Moore, 28 €
- Top Ten: Más allá del Último Distrito, 12 €

RBA
- Clásicos del Humor # 1, Mortadelo y Filemón, Agencia de Información I, 3,95 €

Mangaline
- Siempre es Domingo Nº 2 (de 2), 9 €

ebay
- Clasicos DC Nºs 1 y 7
- Batman Annual Nº 4
- Batman v2 Nºs 4, 22, 25 y 27

Como veis aún tengo algún pendiente de compra (o quizás descarte) pero en líneas generales esta es la confesión de enero. Las compras de ebay han sido principalmente números repetidos de Zinco que tenía en mal estado. El mes que viene más.

Action Comics: El inicio de todo



Hoy estamos de enhorabuena. En el la tienda online de ComicConnect, comienza hoy la subasta del Action Comics número 1, el cómic que lo comenzó todo. La primera aparición de Superman y el comienzo de los superhéroes. Un Superman muy diferente al que hoy conocemos, que aún no volaba y que saltaba como después haría Hulk, pero que en definitiva significaría el germen de todos los cómics que han venido después.

Para los que estáis interesados en la puja, comentaros que se calcula que sólo existen unos 50 ejemplares en buen estado en todo el mundo de este cómic y que, aunque arranca con una puja inicial inferior a 1€, las últimas ocasiones en que se dio esta oportunidad alcanzó los 500.000$.

Cuando consiga mi máquina del tiempo ya sé qué es lo primero que voy a hacer: retroceder a 1938 y hacerme con una buena cantidad de ejemplares.

[Leído en El País].

ACTUALIZACIÓN (18/03/2009): Finalmente el afortunado ganador de la subasta ha sido John Dolmayan, batería del grupo System of a Down y propietario de Torpedo Comics, por tan sólo 317.200$.

Robin de Brian Bolland

La primera serie limitada de Robin (1991) contó con las magníficas portadas de Brian Bolland. Todo un atractivo para los potenciales compradores. Aquí os las dejo.

Robin # 1 (Enero 1991), Brian Bolland

Robin # 2 (Febrero 1991), Brian Bolland

Robin # 3 (Marzo 1991), Brian Bolland

Robin # 4 (Abril 1991), Brian Bolland

Robin # 5 (Mayo 1991), Brian Bolland

¡Qué bueno Bolland! Creo que haré una selección de algunas de sus portadas en DC para ponerlas por aquí.

martes, 24 de febrero de 2009

Jeff Smith definiendo su Bone


"Mi respuesta estándar es que es El señor de los anillos mezclado con Bugs Bunny. Imagínate a Bugs Bunny dando un gran, húmedo beso en la boca a Aragorn y tendrás la idea básica, je, je. [...] Pensé que sería divertido enviar un personaje tipo Tío Gilito a una aventura realmente larga y seria."


Jeff Smith

lunes, 23 de febrero de 2009

Lorna de Azpiri

Ilustración de Alfonso Azpiri de Lorna
X salón del cómic de Granada (12 de Marzo de 2005)

jueves, 19 de febrero de 2009

Batman, Joker, objetos gigantes y Neal Adams

No se puede pedir mucho más. Otra de mis portadas favoritas.

Batman # 251 (Septiembre 1973), Neal Adams

miércoles, 18 de febrero de 2009

¿Quién dijo miedo?


"El miedo y el terror te hacen menos capaz de hacer cualquier cosa. No puedo pensar en nada que me aterrorice, aunque el diseño de vestuario de la película de
Watchmen esté bastante cerca."


Entrevista en Público (14 de Febrero de 2009)
Alan Moore

Definición de miedo: Alan Moore hablando de vestuario.

martes, 17 de febrero de 2009

Entrevista a Munuera

Hubo un momento en el que se comentó que dejabas Spirou, hubo unos problemas con la editorial, al final continuaste… ¿Nos puedes aclarar un poco qué ocurrió?

Me hace falta estar moderadamente borracho y tener tiempo, porque se trata de un relato de tintes épicos… por resumir muy brevemente, justo al acabar el primer álbum (que hubimos de realizar en muy poco tiempo, con una presión bestial), Dupuis fue comprado por un grupo, Media Participations, poseedor además de Dargaud, competencia tradicional de la editorial belga. Esta compra despertó una serie de profundos cánceres dormidos en el seno de la editorial, luchas de poder muy jodidas, en medio de las cuales, como un George Bush con Cara de pánfilo cualquiera, nos encontramos nosotros. Empezó la cosa por el despido sumarísimo de Duvault, nuestro valedor en la empresa, y el consiguiente saboteo a su último proyecto de envergadura (nuestro primer Spirou, a la sazón). Y de ahí en adelante todo fueron madres mías y urticarias tremebundas. Hubo cuatro cambios de dirección en cuatro años, siempre coincidiendo con la salida de nuestros álbumes, y cuatro directores que se obstinaban en conocer la solución a todos los problemas (ninguno la poseía, en vista de que todos fueron despedidos sin honores). Dupuis se enfrentaba a sus propios errores, empezando por la arrogancia con la que se condujo en los noventa, cómodamente instalada en su preponderancia en el mercado, pero que ya no es factible en la nueva situación de la industria, fuertemente modificada por la irrupción del manga y de nuevas editoriales (Soleil y Delcourt) apropiándose de una parte cada vez más importante de la cuota de mercado tradicional de Dupuis (los tebeos familiares, que allí llaman “tout public”) y viviendo una expansión tan atroz de las novedades que las librerías de fondo (fondo en el que se sustentaba la tranquilidad económica de la casa), ya no existen. Y Jean-David y yo, cagontó, dibujando las aventuras del personaje que es la imagen de la casa. Una imagen que nadie sabía la que era ni a qué correspondía… De nuevo enfrentado a un Mihura, pero esta vez, con otro viniendo de la dirección opuesta y dispuestos los dos a cogernos en mitad con toda su mala leche.

Hubo ruido de sables, amenazas judiciales, recurso a abogados y todo tipo de maniobras, pero al final conseguimos concluir nuestro contrato, realizando los cuatro álbumes que en principio se nos encargaron.

Y, pese a todo, disfrutando todo lo posible del proceso, a ratos sí, a ratos no, trabajando en el último libro con Yann, un guionista que para mí es mítico y fortaleciéndonos nosotros mismos en nuestras propias convicciones.


De la entrevista que Jose Luis Munuera ha concedido a Entrecomics. Leedla completa porque no tiene desperdicio.

Para ver más del artistazo que está hecho este murciano, mirad su hilo en ArtBox y, sobre todo, buscadlo en la librería.

El PAMMHG invade la Sagrada Familia

Esta mañana me han sorprendido con la noticia. Misteriosamente y no se sabe cómo (investigaremos), pero la revista PAMMHG! está disponible en la Biblioteca de la Sagrada Familia.


Si alguien sabe cómo ha podido ocurrir que lo comente.

Seguiremos informando...

Una pared del despacho

La que se puede ver. en el resto hay estanterías.

De izquiera a derecha y de arriba a abajo se puede ver una litografía de Batman de Dick Giordano, una ilustración original de Namor de Lopez Espí dedicada, y la máscara de V de Vendetta colgada sobre el Blacksad de Juanjo Guarnido.

lunes, 16 de febrero de 2009

Guía del coleccionista de cómics (I)

En las páginas de cubierta de los cómics de Zinco, ví estas viñetas cómicas del famoso Fred Hembeck y con guiones de Beppe Sabatini, que en su época hicieron para la revista Comics Scene y que también publicó en su momento Zinco.



Los textos estaban acompañados de unas frikiles recomendaciones (que suscribo en todos los sentidos) del coordinador editorial de Zinco, Miguel G. Saavedra.

Y sí, he estado buceando este fin de semana en mi colección Zinco, aunque no he encontrado ninguna más. Si alguien encuentra alguna más que la pase. ;-)

Big Culo Day 2009!

Muchos de los aficionados al murciélago echaremos en falta la colección que ya hace un año nos prometía Planeta, y que aún no ha publicado ni parece que tenga prisa. Pero ahora me gustaría recordar aquella colección de la que no sólo no recuerda, sino que ni tan siquiera los aficionados parecen echar en falta.


Y es que antes de la exitosa serie que arrancara Brubaker, Doug Moench y Jim Balent tuvieron una larga etapa en una serie propia que duró nada menos que 96 números y que mostraba ante todo a una ladrona que era heroína más por accidente que por vocación.


Y aunque sus primeros números han sido publicados en España ya en un par de ocasiones, esto ha sido motivado más por su (escasa) relación con la saga del Knightfall que por... oye, perdona, ¿puedes prestar un poquito de atención? ¡No, a eso no! Uno intenta hacer un post medianamente interesante que pueda llenar de inquietudes a los lectores y resulta que...


Bah, ¡qué demonios! ¡Que hoy es el Big Culo Day!

jueves, 12 de febrero de 2009

Una cita con el futuro


"El Eternauta comenzó siendo un cuento corto, de apenas 70 cuadros. Luego se transformó en una larga historia, una suerte de adaptación del tema Robinson Crusoe. Me fascinaba la idea de una familia que quedaba sola en el mundo, rodeada de muerte y de un enemigo ignorado e inalcazable. Pensé en mí mismo, en mi familia, aislados en nuestro chalet y comencé a plantearme preguntas".

Héctor Germán Oesterheld

miércoles, 11 de febrero de 2009

Zemo, ese pequeño diablillo

David Rubín, (os he hablado ya de él, ¿no?), anunció ayer en su blog que su serie Zemo dejará de aparecer en la revista BDBanda para volver el año que viene en un proyecto de mayor número de páginas. Si a primeros de 2007, David pedía que pusiéramos un Zemo en nuestra vida, ahora parece que lo deja en reserva para que crezca y venga en 2010 más fuerte que nunca. La verdad es que los motivos que argumenta son claros y, sin duda, legítimos (faltaría más), aunque su abandono, sumado al de Victor Rivas (buscad "escamado" en su galería, que están las 8 páginas) en el primer número, a la reciente edición de Las Serpientes Ciegas que se serializa (¿serializaba?) en la revista, más su inestable periodicidad espero que no asesten un golpe mortal a la misma, porque me parece de las mejores iniciativas de cómic patrio. Y más allá de esto, aún me quedan huesudos, cabezudos y c-ariño-sos motivos para seguirla esperando con la paciencia que haga falta.

En el camino, Zemo nos ha dejado 3 historias cortas que nos han contado su origen y un divertido planteamiento que aunque espero que comience de cero para su nueva etapa, era lo mejor de la revista junto al trabajo de Monteys en Calavera Lunar. Diseños interesantes, con lo que empezaba a parecerse al BPRD del Hellboy de Mignola pero en un tono muy Buffy, unos personajes divertidos y un protagonista con mucha miga, humor y mala uva a la vez. Parecía una especie de versión "negra" del Mot de Azpiri y el Dr. Jekyll.

En cualquier caso, esta etapa para mí no será olvidada nunca, porque fue la que me hizo conocer a Rubín, el año que viene veremos lo que da de sí el nuevo arranque del personaje, y ahí estaremos esperándolo, porque seguro que merecerá la pena.


Diseños previos del personaje

Alice, la piroquinética

Capítulo 1 página 4, Zemo conoce a Behemoth

Capítulo 1 página 5, Lápiz y final

martes, 10 de febrero de 2009

Lorna con Rotulador


Lorna dedicada por Alfonso Azpiri en las primeras jornadas de Animamalaga (2 de Septiembre de 2005). Espero que antes del verano publiquen el primer recopilatorio de las aventuras de la rubia más erótica del panorama comiquero patrio.

Un juego para comérselo


lunes, 9 de febrero de 2009

El Eternauta (reseña)

Tenía unas referencias muy difusas sobre este cómic del que jamás había leído nada hasta primeros del año pasado. Por un lado un muy buen amigo mío no hacía más que hablar maravillas de esta obra, y aunque siguiendo su criterio he leído obras maestras del cómic a las que a priori jamás me habría acercado, también disfruta con cómics underground y algunos europeos que jamás fui capaz de terminarme. Por otro, el look del protagonista, al menos en la imagen más conocida de este cómic, con esa especie de traje de submarinista con la escopeta no me llamaba para nada la atención. Sí, esa que aparece en todas las portadas que he visto y la que luce también en la edición 50 aniversario de Norma. Así que con todas estas reticencias, me decidí a acercarme a la anunciada como la máxima obra del cómic argentino aprovechando esta edición integral y su buen precio (22€ por 368 páginas tal y como está el mercado no está mal). Baste decir que no sabía lo que me estaba perdiendo hasta ahora.

La historia eterna

La historia comienza una noche de 1957 (año de publicación del cómic) cuando un hecho sobrecogedor sorprende a Germán, un guionista de cómics. Frente a él aparece de la nada un hombre que se presenta como El Eternauta y que empieza a contarle su historia. Una historia que empieza con una catástrofe terrible, una nevada mortal sobre Buenos Aires mata a todo el que toca, dejando la ciudad desierta y con contados supervivientes atrapados en sus casas (de ahí el look del protagonista), conformando un misterio creciente que se apodera del lector y lo envuelve en una sorprendente historia de ciencia-ficción de esas que reinaban en la época, pero con todos los matices de un Robinson Crusoe moderno, como una metáfora de liberación política que vivía entonces Argentina y que lamentablemente se puso de nuevo en vigor pocos años después (y se repite eternamente a lo largo y ancho de la historia de la humanidad). Estos matices de superación humana y de connotaciones políticas son los que han reflotado El Eternauta una y otra vez, resaltando lo que para mí es una de sus mayores virtudes: es una aventura atemporal y que sin duda (yo sólo la he leído una vez) se revaloriza con cada nueva lectura que se haga de ella.

Este nuevo reflote de la historia de El Eternauta toma matices proféticos si tenemos en cuenta que en la dictadura Argentina que fue de 1976 a 1983, el 27 de abril de 1977 Oesterheld fue secuestrado junto a sus hijas y desde entonces sigue desaparecido. Lo que años después proporciona nuevas lecturas y duros matices a esta historia eterna.

Otro de los puntos fuertes de El Eternauta, es su localización tan próxima y tangible para sus lectores de la época (y para los actuales gracias a la globalización), como es Buenos Aires, nombrando constantemente sus calles, avenidas y sitios emblemáticos, usándolos para mostrar la desgracia de perderlo todo y para arrastrar a Juan Salvo (nuestro Eternauta) y sus compañeros en una lucha desigual de contra la adversidad y la desesperación, convirtiéndose en una de las mayores lecciones de humanidad que pueda nadie enseñarnos a través de un relato de ficción.

La única traba inicial que tendrá que enfrentar el lector ante El Eternauta es heredera de su publicación en entregas de pocas páginas a lo largo de más de 100 semanas en la revista Hora Cero (4 de Septiembre de 1957), lo que obliga por formato a que más a menudo de lo deseable se produzcan continuos recordatorios de lo ocurrido anteriormente. Esto puede resultar machacón y pesado, y alguno diría que cuesta meterse en la historia con tanta pausa sumaria, pero una vez superado este escollo (sobre todo si se llega con él conocido, comprendido y asumido) no creo que a nadie le cueste sumergirse, ya sea con escafandra o sin ella, en la aventura de El Eternauta.

El dibujo eterno

Aunque para mí el punto fuerte de la obra es ante todo el guión de Oesterheld, en parte porque no me llamaba la atención ni el diseño del personaje ni el crudo blanco y negro de sus páginas, no hay que dejar de reconocer el mérito que tiene Solano López en plasmar toda esa mezcla de urbana realidad con la fantasía de la ciencia-ficción, en un Buenos Aires reconocible (arriba el estadio de River) y con unos personajes tan humanos como pueden serlo. Aunque la historia nos lleve a través de drama y desesperación a lo largo de muchas de sus páginas, esto no sería posible sin la excelencia de las expresiones faciales del artista que fue capaz de proporcionar todas estas emociones en una mirada del protagonista a través de esas incómodas gafas y esa mortal nieve. Además, siempre me pareció más difícil de trabajar con el formato apaisado, ya sea por falta de costumbre o porque no veo los mismos artificios típicos del medio igual de impactantes aquí, pero eso para mí no hace más que sumarle méritos a Solano López. Tratándose de esta obra parece que hablar de él sea como bailar con la fea, pero mientras más se remiran las páginas y se piensa en las limitaciones del blanco y negro, los medios de reproducción había en la época, pocas veces el dibujo hizo tanto mérito de un buen guión.

¿El Fin del Eternauta?

Cuando apenas me restaban 30 páginas para concluir El Eternauta me sentía angustiado por la llegada del final. La mezcla de intriga por conocerlo y la pena por abandonar a esos personajes tan reales a su suerte era lo único que me rondaba la cabeza cuando me aproximaba a lo que no podía ser más que un trágico desenlace. Y así, de repente, en menos páginas de lo que uno se podría esperar, Oesterheld resuelve la historia de un modo magistral, fiel al espíritu del género, del mensaje de El Eternauta y cerrando la historia pero dejando un infinito horizonte de historias imaginadas.

Pocos años después de terminar El Eternauta y ser exitosamente recopilado, se hizo una especie de remake con dibujos de Alberto Breccia (que me gusta mucho) con un nulo éxito por lo transgresor del dibujo de este último. Además, poco antes de su secuestro (en 1975), Oesterheld y Solano López realizaron una segunda parte que enlaza directamente con la historia original y en la que un rebelde Oesterheld, en la clandestinidad, volcó mucho de propaganda política revolucionaria e incluso se atrevió a coprotagonizar más allá de como mero narrador. Además en la década de los noventa otros guionistas crearon otras secuelas futuristas e incluso en 1999 tuvo un fallido intento tipo cómic-book americano.

Ahora que Lucrecia Martel prepara la adaptación al cine de El Eternauta para el año que viene, es un excelente momento para ponerse con su lectura, aprovechando que la recopilación está tan a mano y que pronto podremos ver esa nieve mortal en movimiento. Hay grandes expectativas puestas en la película de la que apenas se ha vislumbrado esta imagen.


La secuela, protagonizada casi tanto por Oesterheld como por Juan Salvo, ya está en mis manos, e Historietas Argentinas está reeditando mucho material que incluye esta secuela de los propios autores y la posterior, Odio Cósmico. Es improbable que tengan el nivel que tiene la obra original, y antes de sumergirme en estas obras derivadas ya encuentro nuevas y sobrecojedoras satisfacciones en la primera viñeta de la historia original...

"Hacía frío, pero a veces me gusta trabajar con la ventana abierta: mirar las estrellas descansa..."

NOTA:
Esta reseña debía haberse publicado hace ya un año, pero como iba a aparecer en otra web como parte de un concurso de reseñas para Norma, he estado esperando que esa publicación se llevara a cabo. Finalmente he optado por publicarla.

viernes, 6 de febrero de 2009

Dedicatoria del Mot de Azpiri

El pasado viernes, Alfonso Azpiri estuvo en la FNAC de Málaga y, además de hacerme esta dedicatoria en mi recopilatorio de Mot, contó alguno de los detalles de su contrato con Planeta y sus próximas publicaciones, que incluyen tan sólo para este año, el segundo recopilatorio de Mot, el comienzo en mismo formato de las aventuras de Lorna y un album especial recopilando llamado Spectrum con todo el material que realizó para las compañías de videojuegos de los juegos de Dinamic y que ilustraron las portadas de la Micromanía durante tantos números. Este último probablemente para Mayo.

martes, 3 de febrero de 2009

Joe "Marvel" Quesada

Batman Gallery (1992), Joe Quesada

Los orígenes de Quesada fueron de la mano del murciélago, Azrael y The Ray, todos ellos en DC Comics.

La caracterización de los villanos y la perspectiva extrema de esta portada siempre me fascinaron.