Historia de mi primera vez

He tardado más de la cuenta en comenzar esta pequeña crónica de mis tres primeras horas en el saló de Barcelona, pero aquí está.
Después de más de veinte años coleccionando comics, y pensar en el saló de Barcelona como lo más que podría encontrarme, llegué a él con la apatía del que ya lo tiene todo más que visto, y apenas ví mucho stand, mucha tienda y muchos tebeos, vamos lo que suelo ver todos los días en mi tienda, salvo que quizás todo más grande. Claro que la compañía quizás no fuera la apropiada y en un entorno algo más friki a lo mejor habría disfrutado más, pero esas fueron mis sensaciones.
Las exposiciones estuvieron muy bien, sobre todo me gustó la de Víctor de La Fuente y la de Juanjo Guarnido (a pesar de que estos bocetos ya estaban más que publicados con tanta edición especial de la edición especial), aunque el resto no les iba a la zaga. Como no iba a estar mucho tiempo en el saló no pude entretenerme en hacer colas para que me firmaran los autores, así que tampoco me informé mucho de quiénes estaban firmando. Ya sabía que Bilal había estado el día anterior así que creí que ninguno despertaría mis pasiones tanto como para aguantar una mínima cola. Luego me enteré que justo cuando yo entraba Carlos Giménez había estado firmando, pero ya era tarde para lamentaciones.
Impresionante fue el stand de Norma que estaba de aniversario y se vistió de gala para la ocasión. El de seguridad del stand de Planeta pretendía que precintara todas mis bolsas para poder entrar, como si pudiera llevarme un tomo Absolute discretamente en el bolsillo del pantalón, así que sabiendo que todas esas novedades me esperaban en casa pues tampoco puse mucho interés y no entré.

Una de las alegrías fue la de encontrar a gente conocida sólo por vía inet y poderlas conocer en persona como fué la gente de Panini, de lo más cordial y amable. Ponç, ¡seguimos en contacto! y también la de poder esquivar a gente que tampoco había mucho interés de tener que saludar encima cuando uno sale de vacaciones por ahí. Qué cinturita tengo para esas ocasiones.

En fín, una experiencia que habrá que repetir otro año con algo más de tiempo para poder bucear con más dedicación en los stands de antiguo y poder sufrir en mis propias carnes las atrocidades de las que todos se suelen quejar sobre colas, autores malencarados y demás parafernalia. Por mi parte una experiencia más de compra compulsiva en ambiente sobrecaldeado que sumar a mi colección.

Cazas logradas: Cerrar los números que me faltaban de Invencible y 100 Balas para unir los principios y finales de serie que ya tenía.

Alvar Mayor. El Dorado está en sus páginas

¡Menuda obra maestra que está editando Norma!

El genial Carlos Trillo y el heredero de toda el arte de Alberto Breccia, su hijo Enrique, nos llevan por lo más intrincado de las oscuras selvas amazónicas guiados por el eternos buscador Alvar Mayor, hijo de conquistadores y el mejor conocedor de estas tierras y sus misterios. Siempre guiando la avaricia española a través de la aventura y la mística de las Américas del siglo XVII, este personaje duro, oscuro y encallecido por la vida, se nos muestra como un reflejo de la tierra en que nació y que tan bien conoce. Diríase que nos encontramos ante el Clint Eastwood de los conquistadores. Ni bueno ni malo, sino todo lo contrario.

El volumen recopila las historias de 12 páginas aparecidas previamente en la revista argentina Skorpio entre 1977 y 1982, que generalmente son autoconclusivas salvo la continuidad de algún personaje secundario y que atesoran todo el sabor de las aventuras de ciudades de oro perdidas, viejos dioses e intrigas coloniales.

El blanco y negro enriquece aún más si fuera posible el vigoroso y detallado lápiz de Enrique Breccia, lleno de ambientes oscuros e iconografías del relato tan inteligentes como sobrecogedoras, aunque lamentablemente se pierde algo de detalle en la edición de Norma, que tiende a convertir en negros algunas líneas quizás demasiado juntas para la calidad de reproducción que podían proporcionarnos y extrañamente (por lo inhabitual y fácilmente corregible) la tipografía de la rotulación cambia a mitad del tomo. Una auténtica pena que no resta interés por la edición, realmente indispensable para cualquier aficionado al comic de aventuras.

Del Tebeo al Manga. Primeras impresiones

Finalmente, ayer pude ver el resultado del proyecto de libros teóricos sobre el comic que lanza Panini. La primera impresión no ha podido ser más satisfactoria.

A la edición tremendamente cuidada se suman detalles como resumen de capítulos, cronologías y biografías selecionadas. La profusión de datos puede llegar a apabullar al principio, aunque la narración cronológica hace que se haga más natural y poco pesado.

Este primer ejemplar se divide en dos capítulos, uno dedicado al origen de la industria del comic y otro a las tiras de prensa (parece que haciendo incapié en las que todos suponemos). Por el momento apenas he leido las primeras 20-25 páginas y a pesar de la profusión de datos y de ser la parte más tediosa me ha parecido muy interesante y bien narrado.

El hecho de que se trate de un proyecto a medio-largo plazo (2-3 años) hace que aún tenga que esperar a los tomos que a priori me resultan más interesantes, pero si todo sigue como hasta ahora la espera merecerá la pena.

Cambiando cromos

Dentro de poco en nuestras librerías especializadas es probable que nos encontremos con la nostálgica imagen de corrillos pasando su montón de cromos y la típica coletilla "lo tengo, lo tengo, lo tengo,..." y es que Panini va a lanzar con motivo de la película de Spiderman 3 un álbum de cromos del personaje.

La nostalgia me trae los recuerdos de la búsqueda de tal o cual cromo, de ir tachando una pequeña listilla y cambiar la montaña de repetidos por el último para rellenar el álbum.

¿Os sumaréis a esta colección de cromos? ¿Seréis vosotros de esos que estarán cambiando en la tienda? Yo ya hace tiempo que rellené mis albums de V, David el Gnomo, Willie Fog, El Inspector Gadget, Efectos Especiales o Batman como para ponerme con esta, pero si no es vuestro caso, ¡Suerte y a completarla!

...lo tengo, lo tengo, lo tengo,...

Imagen extraida de Blig Blag Blog.

Los Rostros de Batman (I): Marshall Rogers

A pesar de su breve etapa junto a Steve Englearth y Terry Austin en Detective Comics (Detective Comics # 471-479, Agosto de 1977 a Octubre de 1978), Marshall Rogers (1950-2007) sigue teniendo en su haber uno de los rostros más representativos del murciélago, incluso considerada por muchos como la versión definitiva del personaje. Y no es algo tan descabellado, si nos remitimos a las sucesivas reediciones de su etapa, en los ochenta (Shadow of the Batman # 1 a 5, Febrero de 1985 a Abril de 1986) y el más reciente, y aún disponible por Previews, Trade Paperback (Batman: Strange Apparitions, 1999). Esta etapa constituyó el rescate de las historias detectivescas de Batman y de las tramas interesantes, y en ellas no sólo podremos disfrutar de un excelente Batman, sino del que posiblemente sea uno de los Joker más inolvidables, en la mítica historia del Pez Sonriente (Detective Comics 475, "The Laughning Fish").

Tras un amago de retirada en los 90, realizó un olvidable arco en Batman: Legends of the Dark Knight (# 132 a 136, Agosto de 2000 a Noviembre de 2000) y una reciente secuela de su etapa en Detective en forma de serie limitada y posteriormente recopilada también en TP (Batman: Dark Detective # 1 a 6, Julio de 2005 a Septiembre de 2005) que volvió a reunir al equipo creativo original y en la que se encuentran bastantes puntos en común con el arco argumental de los 70, interesante aunque no atesore la misma calidad.

Poseía un trazo caracterizado por su proporcionalidad en los personajes, sin exageradas musculaturas y un gran detalle en estructuras y edificios que le venía de sus estudios de arquitectura, además de una narrativa de página realmente arriesgada y espectacular que lamentablemente no lució igual en sus trabajos más recientes, ni aún recuperando el elegante entintado de Austin.

Aunque se encuentren fuera de la continuidad actual del murciélago, sus números en Detective Comics siempre tendrán un lugar para los fans de Batman.



Bibliografía batmaniaca esencial:
- Detective Comics # 471-479 (1977-1978). Editados por Zinco en la colección Clásicos DC a primeros de los 80. Recomiendo la edición en TP americana, barata y disponible. Esencial.
- Secret Origins # 6 (1986). Origen del Batman de la Golden Age. ¿Inédito?
- Batman: Legends of the Dark Knight # 132 a 136 (2000). Editados recientemente en la colección regular de Planeta de Batman. Prescindibles.
- Batman: Dark Detective # 1 a 6 (2005). Inédita y sin vistas a ser publicado por Planeta. Prescindible, aunque hay edición en TP americana, barata y disponible.

Otras Bibliografías destacadas:
- House of Mystery # 254, 274, 277 (1977, 1979, 1980).
- Doctor Strange # 48 a 53 (1981-1982).
- Silver Surfer vol 2 # 1 a 10, 12, 21 (1987-1989).

Chino Americano

Cuando una obra te sorprende tanto como Chino Americano no sabe uno muy bien qué decir. Supongo que lo primero que choca es el dibujo tipo cartoon con colores llamativos y sobre todo con una narración de página muy directa de 2x2 o incluso 3x1, lo que deja gran parte de la página en blanco en esta edición de La Cúpula. Pero aunque el dibujo es muy llamativo y hace la lectura tremendamente ágil, el punto fuerte de Chino Americano es el guión.

Este comic es a la vez una fábula mitológica y una historia cotidiana de jóvenes en el instituto, ya que Gene Luen Yang utiliza hábilmente el mito del Rey Mono como atractivo para acabar contándonos un relato humano que habla inicialmente de rechazo y racismo, pero que en el fondo esconde mucho más.

Si bien Jim Wang, el protagonista, es un chino-americano que sufre el rechazo y el maltrato de sus compañeros de escuela por ser diferente a ellos y que busca insistentemente la integración, la historia va más allá, y fábula y cotideanidad tendrán más que ver entre sí de lo que aparenta.

Una fábula moderna enternecedora a la par que divertida, que como toda fábula tiene una enseñanza final. Al fín y al cabo un adolescente no es más que alguien que quiere encajar y que debe empezar por aceptarse a sí mismo.

Todo Paracuellos

Tras la guerra civil española, muchos niños de la guerra procedentes de hogares rotos, padres muertos o en prisión o símplemente sin medios económicos, tuvieron que alojarse en los Colegios de Auxilio Social. Unas "instituciones de corte falangista donde la educación era muy de la época: los pilares eran básicamente mucha religión y mucha instrucción militar (...) Era como un pequeño cuartel."

La vida en estos colegios de caridad es algo que Carlos Giménez conoce de primera mano, ya que pasó en ellos desde los 6 años saltando de uno a otro (Batalla del Jarama, General Mola, Joaquín García Morato...) hasta los 14. En estos hogares cuna, disfrutó de sus primeros cómics con títulos como Roberto Alcázar y Pedrín, El Guerrero del Antifaz, Purk el Hombre de Piedra, El Espadachín Enmascarado o El Cachorro, y a la larga nos daría un profesional con más de 40 años a sus espaldas e innumerables éxitos.

Al convertirse en un profesional del medio no dejó pasar la oportunidad de plasmar cómo eran estos lugares del mejor modo que conoce, dibujando. Al igual que en su otra obra de carácter autobiográfico, Los Profesionales (también de obligada parada), toma relatos propios y ajenos (de otros compañeros de la época), entremezclando la realidad con la historieta hasta completar 54 episodios de lo que probablemente sea el "mejor documento que se puede utilizar para conocer como eran los colegios de Auxilio Social.Es lo que pretendía en su momento, que se conociera lo que había ocurrido."

Si bien en Los Profesionales, Carlos Giménez muestra una narración divertida y desenfadada de aquellos primeros años como historietista en el estudio de Selecciones Ilustradas, Paracuellos es una obra llena de sentimientos, de dolor, ternura y de recuerdos de gran dureza, que el autor esgrime con un gran desparpajo consiguiendo la sonrisa a veces y la congoja a la página siguiente. Lo que podría haberse convertido fácilmente en un panfleto más, se me antoja un gran tesoro repleto de sentimientos que se engrandecen con el paso del tiempo. Las páginas de Paracuellos representan toda una lección del madrileño de narrativa y expresión, que le instituyen en uno de los dibujantes más expresivos del panorama nacional e internacional. Nunca un estilo caricaturesco provocó tanta ternura.

Paracuellos fue realizada en dos etapas. La primera de ellas, a finales entre 1977 y 1982 se compone de 28 episodios y un total de 90 páginas recogidas en dos álbumes y la segunda, entre 1997 y 2003, consta de 26 episodios que suman otras 192 páginas distribuidas en 4 álbumes.

Ahora Mondadori recopila en una edición integral los 6 álbumes, en formato apaisado de bolsillo y dividiendo las páginas en dos planchas, sin que esto afecte en gran medida a la lectura. Se podría decir que no es el formato original de página y que por tanto se pierde parte de la narratividad, pero lo popular del formato y su distribución disminuyen estas pequeñas faltas. Además aún está disponible el formato álbum de la editorial Glènat, con lo que no hay más que elegir la opción que mejor se acomode al gusto o al bolsillo del lector para empezar a ver el mundo a traves de los ojos de un niño aunque sólo sea por unas páginas.

Me estreno pensando...

Muchas han sido las iniciativas como navegante que he empezado, y ya era hora de que llegara a centrarme y dedicar un tiempo a aclarar ideas y ordenar esos pensamientos en un sólo sitio.

Esto no quita que siga colaborando y trabajando en los diversos sitios que ya lo hago. Usaré este foro más como un eco o índice de todas esas colaboraciones que voy realizando por aquí y allá. Si alguno llega alguna vez a ser lector fijo de este sitio espero que también siga visitando los otros lugares que enlazo por ahí al lado porque yo no dejaré de hacerlo.