¡Pásame el bat-repelente de tiburones!

El 12 de Enero de 1966 arrancó la serie de tv más exitosa de la década. Posiblemente el primer fenómeno social televisivo que representó la primera ola de batmanía (la segunda vendría de la mano de la película de 1989, aunque menos duradera).

Con dos excelentes temporadas (de 34 y 60 episodios respectivamente, 1966-67), un largometraje (1966) de carácter promocional para vender la serie al extranjero, y una tercera temporada (de 36 episodios, 1968) algo más descafeinada. La serie televisiva de Batman ha envejecido bastante mal debido a que su estilo visual extremadamente camp (que requiere de una apreciación irónica para no ser considerada como absurda, tonta y pedante) ya no tiene la vigencia de aquella época. Además estaba repleto de guiños a la sociedad de entonces que ahora o no tienen el sentido de ayer o simplemente ya no se recuerdan.



A pesar de todo, os marcaré algunos de los motivos por lo que hay que amar esta serie:

1. El encadenar 2 capítulos continuados por semana proporcionaba esa inquietud del continuará que es tan difícil de ver hoy día.
2. Lo serios que eran los protagonistas Batman y Robin en la resolución de sus misterios a pesar de lo obviamente ridículos que iban vestidos. ¡Esa voz de Adam West!
3. La galería de villanos estaba interpretada por primerísimas figuras de la actuación.
   
4. Dos de las actrices que interpretaron a Catwoman: Julie Newmar y Lee Meriwether (dejo fuera a Eartha Kitt porque estuvo muy poco tiempo).
5. La atrevida inclusión de las onomatopeyas en la película y en esos divertidos openings.
6. Los diálogos que hacían de resolución de los acertijos de Enigma.
7. La escena de cambio de ropa.
8. Las famosas escenas trepando con la cuerda (todos los famosos de la época querían aparecer ahí).
   
9. Los gadgets imposibles de Batman
   
10. Las dos escenas de la película que aún me hacen llorar de la risa: La de la bomba y la del tiburón.
    

Así que hoy hace la friolera de 42 años que el Comisario Gordon pronunció estas palabras: I don't know who he is beneath that mask of his, but I know when we need him, and we need him now! Efectivamente, ¡le necesitamos!

Echad unas risas con las mejores escenas de la película:

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