jueves, 22 de mayo de 2008

Absolute Superman: Las Historias de Alan Moore

Esta nueva edición de lujo de Planeta, incluye tan sólo una parte del recopilatorio americano dedicado al barbudo inglés. Hecho que resulta un tanto sangrante si vemos que su contenido al final se nos va a vender por entregas. Dicho lo cual voy a centrarme en el contenido del absolute:

La historia de Para el hombre que lo tiene todo no es sólo probablemente mi historia favorita de Superman, sino que también estaría en una lista de las mejores historias del cómic de todos los tiempos. Comienza con una escena de lo más cotidiana (dentro del contexto) de unos amigos que llevan unos regalos a un cumpleaños, pasa a ser una magnífica historia de ciencia ficción, mezclada con una batalla épica y desesperada por la supervivencia (en vez de por la victoria), para cerrar el círculo volviendo al grupo de amigos y a la entrega de regalos con toque de humor incluido y el contrapunto final del villano. Un sube-y-baja perfecto de narración y emociones que tiene incluso lugar para desarrollar las personalidades de Superman y Robin (Jason Todd) en el camino.

Y eso sin mencionar aún el magnífico papel de Gibbons a los lápices, que a pesar del salpicado uso de tramas (un tanto fuera de lugar por lo esporádico a mi modo de ver) está pletórico. Con viñetas amplias y llenas de detalles, y contundente en la acción. Quizás el Mongul más terrorífico jamás dibujado.

En definitiva, para mí una de las mejores historias únicas de la historia del cómic.

El que pueda o quiera, que vea el homenaje-secuela del Green Lantern Especial número 5 de Planeta de Johns y Pacheco, con Green Lantern, Green Arrow y el propio Mongul de protagonistas. Muy disfrutable para los nostálgicos, pero obviamente sin alcanzar las cotas de perfección de este anual.

La siguiente historia, ¿Qué fue del hombre del mañana?, contada en dos partes (Superman # 423 y Action Comics # 583, Septiembre de 1986) es el canto del cisne del Superman Pre-crisis. Un disfrute para los sentidos y para los añejos que conozcan la historia de esa época del personaje y también una buena historia para los que no lo hacemos.

Las historia narra una entrevista que le hacen a Lois Lane en el futuro (en aquel entonces - 1986 - 1997 era el futuro) contando a modo de flashback los acontecimientos que rodearon el supuesto final de Superman, que en aquel entonces no era más que un nuevo principio a manos de John Byrne, pero editorialmente era un punto de inflexión realmente importante. Por estas páginas pasan Bizarro, Toyman y Prankster, El Hombre Kriptonita, La legión de Superhéroes y más personajes, aunque la amenaza real llega al final de manos de sus dos peores enemigos: Braniac y Luthor en una curiosa y temible encarnación.

Finalmente, el propio Superman (siempre según lo narrado por Lois) va dándose cuenta de que su muerte está próxima, y va "haciendo las paces" con los lectores a través de los secundarios de la época, en una hermosa metáfora a modo de fin que gana aún más enteros sabiendo que representa el final de la etapa del clásico dibujante Curt Swan con el personaje.

El final, todo un acierto, mezclando los juegos de palabras (Jordan Elliot) como guiños al lector y un viaje al futuro mental que hacen primero el Superman de la narración, el lector al volver a la entrevista y finalmente el hijo de Lois mostrando más de lo que incluso ella misma podría saber o no.

Esta misma encarnación de Superman también se ha visto reflejada en otras historias de multi-tierra como no podía ser de otro modo.

Y finalmente, La Jungla, cierra el tomo en lo que no es más que una muestra de la devastación que el poder combinado de sus protagonistas, Swamp Thing y Superman, podría producir. Un considerable bajón a nivel argumental que no parece más que una publicidad por parte de Moore (recordemos que apareció en una serie de DC tipo Team-Up y no en la propia de ninguno de los protagonistas) hacia "su criatura" con la típica evocación hacia "el verdor" sólo que con Superman de por medio, lo que es la excusa perfecta para su inclusión en este tomo.

No por esto quiero decir que sea una mala historia ni mucho menos, sólo que en comparación con las anteriores desluce muchísimo. Moore hace un retrato trágico y desesperado del alter ego de Superman, liberándole de sus gafas, su look pulcro y su mojigatería típicas, mostrándolo como un hombre desesperado que poco a poco va desatando todo su poder al encuentro con Swampy.

Una tragedia muy bien ilustrada por Veitch, sobre todo en las escenas más destructivas, y aunque no es un dibujante que me desagrade en absoluto, uno no puede evitar pensar en cómo hubiera quedado esta historia en manos de Bissette. De hecho, unos años después el propio Bissette, como guionista, realizaría una historia con bastantes puntos en común (la enfermedad producida por una ente biológico extraño, el verdor para buscar la cura, y swampy de por medio) pero con Batman como partner del verdoso.

En definitiva, esta edición recoge una brillante selección de obras de Superman y Alan Moore, y aunque la misma se encuentre sobredimensionada (en varios aspectos) es una selección de lo más recomendable. Para los que no estén dispuestos a pagar el precio y quieran disfrutar de ellas no tienen más que buscar (no será difícil, porque SD la distribuyó a librerías especializadas este febrero y seguro que la tienen en catálogo) una edición reducida que apareció hace un tiempo con unos diarios locales que incluye las dos principales historias y alguna más interesante a un precio excelente.



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2 comentarios:

Anónimo dijo...

Hummm.... ya no sé con qué reseña quedarme, si con ésta o con la aparecida en Zona negativa. Cuando ya creía tener claro que este cómic no iba a estar en mis estanterías vuelve a asaltarme la duda, y eso no significa otra cosa que a la larga lo acabaré comprando por mucho que lo haya estropeado el formato Absolut elegido por planeta (esta es la principal crítica de la Zona). En fin, así es la vida de un perdio...

FranciX dijo...

Hombre, yo entiendo la crítica de ZN, porque seguramente le pase como a mí, que tiene con qué comparar. Yo tengo los especiales de Zinco, y sí que veo la diferencia de la que hablan, pero si no los tienes pues yo creo que tampoco vas a notar nada del otro mundo... eso sí, la edición de Clásicos del Cómic (reducida y se acartona rápidamente, casi de usar y tirar) cuesta apenas 3€ y ahí podrías valorar si realmente te interesa.

Yo me quedo con mi edición de Zinco ;-)

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